Entrega integrada de proyectos: por qué algunos proyectos Lean prosperan y otros fracasan

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La entrega integrada de proyectos (IPD) está ganando terreno en la construcción y promete eficiencia colaborativa. Pero si bien algunos proyectos de IPD arrojan resultados excepcionales, otros fracasan. La clave no es sólo el proceso: son las personas involucradas.

¿Qué es la ejecución integrada de proyectos?

El DPI no se trata sólo de colaboración; es un cambio fundamental en la forma en que se estructuran los proyectos. Tradicionalmente, la construcción implica contratos fragmentados en los que cada parte (propietario, arquitecto, contratista) opera en silos, a menudo con incentivos contradictorios. IPD cambia esto.

La idea central es que todos los involucrados (desde el propietario hasta los subcontratistas) firmen un acuerdo único e integrado. Este acuerdo los compromete a compartir riesgos y recompensas. En lugar de relaciones de confrontación, el IPD fomenta la cooperación, la transparencia y la resolución conjunta de problemas.

Para que esto funcione, la mayoría de los proyectos de IPD utilizan principios Lean, especialmente el sistema Last Planner. Esto significa dividir el trabajo en tareas más pequeñas y manejables, involucrar activamente al equipo en la planificación y mejorar continuamente los procesos para eliminar el desperdicio.

El factor humano: por qué los proyectos IPD tienen éxito o fracasan

El mayor indicador del éxito de IPD no es el contrato, el software o la metodología Lean. Es el perfil emocional y conductual del equipo. Los grandes proyectos de construcción (más de 500 personas) a menudo involucran a personas con distintos grados de madurez emocional, habilidades de colaboración y voluntad de asumir riesgos compartidos.

  • Madurez emocional: Las personas que puedan manejar los conflictos de manera constructiva, comunicarse abiertamente y hacerse cargo de sus contribuciones son esenciales.
  • Habilidades de colaboración: IPD exige escucha activa, empatía y voluntad de comprometerse.
  • Tolerancia al riesgo compartida: El acuerdo integrado significa que todos comparten tanto los éxitos como los fracasos. Aquellos que no estén dispuestos a aceptar este riesgo socavarán el proceso.

Por qué falla IPD: errores comunes

Varios factores pueden descarrilar un proyecto de IPD:

  • Falta de aceptación: Si las partes interesadas clave (propietarios, subcontratistas) no se comprometen genuinamente con el modelo colaborativo, el proceso fracasará rápidamente.
  • Mala comunicación: La transparencia es fundamental. Si la información se retiene o se distorsiona, la confianza se erosiona.
  • Dinámica del ego y el poder: Los individuos que no estén dispuestos a ceder el control o compartir el crédito sabotearán el equipo.
  • Capacitación inadecuada: el IPD requiere un cambio de mentalidad. Sin una formación adecuada, los participantes pueden volver a comportamientos tradicionales de confrontación.

El resultado final

El IPD tiene un potencial inmenso, pero no es una solución mágica. El éxito de estos proyectos depende de las personas involucradas. Construir una cultura de confianza, transparencia y responsabilidad compartida es más crítico que cualquier contrato o metodología. Sin el elemento humano adecuado, incluso el proyecto de DPI mejor diseñado probablemente fracasará.

IPD no es sólo un método de ejecución de proyectos; es un experimento conductual. Y como todo experimento, los resultados dependen de los participantes.